En lo que se refiere a los demás oficiales del Concejo, muchos de ellos fueron en su origen caballeros de cuantía, miembros de familias pecheras enriquecidas correspondientes a la oligarquía municipal. En el caso de los linajes católico-viejos su riqueza provenía eminentemente de las rentas procedentes del arrendamiento de las tierras y otros bienes inmuebles que poseían, al tiempo que en la situacion de los judeoconversos el origen de su fortuna radicaba en el ejercicio de ocupaciones así como el préstamo, el arrendamiento de rentas, la artesanía suntuaria (platería), el comercio y el desempeño de oficios de pluma (escribanías). Desde mediados del siglo XVI todas y cada una estas familias se fueron ennobleciendo de forma sistemática a medida que sus miembros conseguían en la Real Chancillería de Granada el reconocimiento de la condición de nobles, que mucho más adelante les dejará conseguir a varios de ellos hábitos de órdenes militares, títulos nobiliarios y altos puestos en la administración. Así, aquellas familias de caballeros copiosos se habían terminado transformando ya en el último tercio del siglo XVI en una oligarquía nobiliaria bien consolidada a través de una fuerte endogamia entre sus miembros.
El estirpe pierde fuelle entre las primordiales viviendas nobiliarias del solar jiennense, más allá de que contaron con un sólida base económica, en tanto que mantuvieron el dominio sobre los territorios señoriales de Villardompardo, Escañuela, Fuensomera, Villagordo, concentrados, en su mayor parte, al noroeste de la ciudad de Jaén, y heredaron el derecho de «almocatracia», el que, gravaba una gran cantidad de actividades comerciales y artesanales de la capital jiennense. Pero esta importante plataforma económica no suplía la sepa de los Villardompardo de los espacios de poder. Tras la decisión de los Reyes Católicos habían desaparecido de los primordiales puestos de resolución política de Jaén y su reino. Por consiguiente, los Torres y Portugal, nuevos sucesos de la vivienda de Villardompardo habían sido perjudicados en el reparto de los espacios de poder en la localidad jiennense.
El Reino De Jaén En La Baja Edad Media Puntos Demográficos Y Económicos
Finalmente, Jaén decidió abandonar su situación inicial, convencida de que las Comunidades no podían vencer y de que sería más beneficioso pasarse finalmente al bando regalista. De esta manera, el contino regio Francisco Sedeño (vecino de Arévalo) de Córdoba pasó a Jaén para acabar con el tumulto. De esta manera, Rodrigo Mesía se aseguró un papel de primera intensidad en Jaén, auspiciado por un potencial económico muy superior al que habían representado los viejos estirpes en litigio. Es recomendable llevar a cabo mención a esta familia nobiliaria porque Bernardino de Torres y Portugal, hijo de Fernando y, por tanto, señor de Villardompardo, entroncó con dicho linaje, a través de su enlace con María Mesía-Carrillo Ponce de León, hija de Rodrigo Mesía.
La existencia de estas familias en el cabildo municipal jiennense se puede constatar, si bien no de manera continuada, desde el último tercio del siglo XV. También en el gobierno de la región estuvieron representadas algunas familias hidalgas que se habían ido ennobleciendo en todo el siglo XV gracias principalmente al servicio de las armas, tanto en el contexto de las guerras civiles castellanas que salpicaron esta centuria y la anterior, como en el de la guerra contra los musulmanes del Reino de Granada. Primeramente, y como consecuencia lógica de haber usurpado el cargo de alguacil durante la etapa de gobierno de las Comunidades, se instó a Bernardino de Torres a devolver la vara de alguacilazgo. Finalmente, el nuevo corregidor Francisco de Sedeño llega a la localidad en el mes de marzo de 1521 para poner fin a la experiencia comunera y cumpliendo fielmente con el cometido de su carta de provisión, el nuevo corregidor solicitó la vara de alguacil mayor a Bernardino de Torres, su detentador a lo largo del gobierno de la comunidad, y se entregó a Martín Ruiz de Santiago, vecino de Higuera de Martos de quien el concejo ciudadano logró el obligado recibimiento.
La cuestión es discernir en que situación quedan los insurgentes y, en concreto, sus primordiales cabecillas, entre los que está el señor de Villardompardo. En principio, parece que se les insta a que abandonen la ciudad, a juzgar por una carta que fechada en Tordesillas, el 16 de enero de 1521, y según la que, el rey, a instancia de Jaén, anula unas órdenes precedentes suyas, permitiendo en este momento que vuelvan a Jaén ciertos caballeros que habían sido expulsados de ella, encabezando la lista, como personas mucho más notables, se encuentran Rodrigo Mesía y Bernardino de Torres, por participación en los levantamientos de las comunidades12. Frente este panorama de la región andaluza, Joseph Pérez concluyó que la ausencia de espíritu innovador se debió a la situación periférica que esta zona ocupaba en la geografía política del reino, tal como a la obtención de mejores beneficios en el intercambio mercantil con el Nuevo Mundo6.
Taula De Debat: “las Implicaciones Del Factor Frontera En El Reino De Jaén A Lo Largo De La Baja Edad Media”
Mediante diversas improntas conservadas en el archivo capitular de Toledo, se analiza la evolución que experimentó la representación iconográfica del campo del sello, evidenciándose importantes modificaciones en el último tercio del siglo XIII. Hay que poner énfasis que Jaén fue a lo largo de esta temporada una de las ciudades que poseyó voto en Cortes, razón por la que el oficio de regidor fue muy codiciado. La participación de un regidor en las diferentes reuniones de Cortes en calidad de procurador suponía un beneficio económico y político asegurado, algo de lo que todos los regidores querrán conseguir provecho. Para esto debían esperar a que les va a llegar su turno mediante el correspondiente sorteo de procuración a través del llamado “sistema de rueda”. Los autores conservan los derechos de autor de las obras publicadas y garantizan a la gaceta el derecho de ser la primera publicación del trabajo de la misma dejan la reutilización del mismo bajo la licencia de uso indicada en el punto 2. La información obtenida se usa para la medición de la actividad de los clientes en la web y la elaboración de perfiles de navegación de los usuarios, con el objetivo de mejorar la página web, tal como los productos y servicios ofertados.
En definitiva, los bandos nobiliarios habían cedido el paso a un nuevo panorama, en que una vivienda ejercita el papel preponderante. No obstante, no debe concluirse que los Mesía fueron la única fuerza importante a estimar en lo que se refiere a la distribución del poder político dentro de la ciudad de Jaén, a pesar de que controlaban la mayor parte del regimiento. Tras el aplacamiento de la insurrección queda por aclarar si hubo algún género de represalia contra los principales cabecillas que se habían rebelado contra su rey, entre los que se encontraba Bernardino de Torres y Portugal.
Número
De esta manera, se produjo el enfrentamiento político y popular en el seno de las clases líderes de la ciudad; pero, por el momento no tenía que ver con los anteriores bandos medievales, sino de la pelea por el control de Jaén entre los incondicionales de Rodrigo Mesía, en el cual se encuadraban la mayoría de los veinticuatros y jurados, así como los nobles; y los incondicionales de Fonseca, grupo encabezado desde 1500 por el nuevo obispo de Jaén, Alonso Suárez de la Fuente del Sauce. Obispos de Jaén y segunda parte de la historia eclesiástica de este reino y obispado, con sumes a la primera y la corographía antigua y actualizada del mismo reino y obispado. La restauración eclesiástica en el reino de Jaén supuso la puesta en marcha de la institución capitular, que residiría en Baeza hasta su traslado a Jaén después de que se verificase su conquista, continuando una parte de los canónigos en la vieja catedral. La organización de este cabildo coincidió con la difusión que el sello de validación experimentó en los reinos peninsulares a lo largo del siglo XIII. En este artículo se estudia la creación del sello capitular de Baeza-Jaén, su utilización como instrumento de garantía jurídica en la expedición de documentos y su custodia.
Bernardino De Torres Y Portugal, Paladín Del Movimiento Comunero En Jaén
El nuevo poderío de estas (sobre todo, los Mesía), unido a la retirada de la confianza regia en el desempeño de los principales cargos políticos del reino y de la ciudad de Jaén, provocó la pérdida de relevancia de los Torres y Portugal en las instituciones de su ambiente más inmediato. Con toda probabilidad, entre los capítulos que más dañaron al descrédito del estirpe fue la participación, como cabeza visible, del señor de Villardompardo en los movimientos de las comunidades acaecidos en la ciudad de Jaén, el día 19 de agosto de 1520. Esta falta de relevancia va a diferir con la situación que vivió la Casa a lo largo de la segunda mitad del quinientos, en tanto que, coincidiendo con el reinado de Felipe II, experimentó su periodo de mayor esplendor, el cual traspasó el campo jiennense, alcanzando las esferas más altas de la estructura político-administrativa de la Monarquía Hispánica. El presente trabajo se enfoca en la implicación directa que tuvo Bernardino de Torres y Portugal, señor de Villardompardo, en el alzamiento de las Comunidades en Jaén, atendiendo a los móviles inteligentes que le llevaron a sumarse a dicho movimiento y a las consecuencias que tuvo para el señorío su participación componente en este trascendental episodio del reinado de Carlos I y de la historia de España.
Entre El Medievo Y La Modernidad, Luchas De Poder En La Ciudad De Jaén
El cargo lo recibió ahora a una edad muy avanzada, prácticamente en la trayectoria final de su historia, en tanto que cinco años después hace aparición en los documentos recogidos en los libros de actas capitulares de Jaén, Fernando de Torres y Portugal, su sustituto en el señorío de Villardompardo. Este protagonizará la etapa de mayor esplendor del estirpe, el cual experimentó un notable ascenso en su estatus. El matrimonio venía a ser no tanto el sacramento que consagraba la unión de 2 personas, como el eje que conectaba entre sí dos conjuntos familiares de distinta procedencia, uniéndolos por firmes lazos que dejaban, en numerosas oportunidades, una eficiente sintonía de intereses3. Todos y cada uno de los nobles tenían muy claro que una de las formas de engrandecimiento de su linaje y de sus características cobraba forma mediante una activa y ventajosa política matrimonial4. Según Raúl Molina Robusto, en el momento de buscar un enlace, los estirpes preferían la exogamia (75%) a la endogamia (25%), puesto que eran incondicionales de la apertura hacia novedosas familias5. Los Torres y Portugal aprovecharon el clima de enfrentamiento que se respiraba en la ciudad entre los Mesía y Fonseca, y se alinearon junto a los primeros por obvias razones, ya que Fonseca poseía los cargos que pertenecieron a sus predecesores y que ellos ambicionaban recuperar.
En cambio, en 1565 este descendía a 37 como consecuencia del consumo de ciertos de estos oficios, para más tarde elevarse a 43 en 1580. Tras producirse nuevos acrecentamientos y consumos, el número de caballeros veinticuatro ascendía a 45 en los primeros años del siglo XVII, llegando a los 48 en 1640 y a 53 en 1657. A partir de este instante, los regidores comenzarán a dejar de asistir a los cabildos, a medida que se vayan celebrando cada vez menos asambleas de Cortes y la oportunidad de obtener nuevos provecho vaya disminuyendo, lo que llevará consigo la pérdida de valor del trabajo de caballero veinticuatro y, consecuentemente, la progresiva disminución de su número. El gobierno de la ciudad de Jaén fue ejercido a lo largo de la Edad Moderna por los regidores (que como su nombre indica, eran los oficiales que regían la localidad), más tarde conocidos como caballeros veinticuatro, en conjunción con los jurados y otros oficiales municipales que se reunían en cabildo para tratar sobre los negocios y todo tipo de temas que afectasen a la ciudad más importante del Beato Reino. Este cabildo municipal se encontraba encabezado por la figura del corregidor, gerente del poder real en la localidad. De igual forma, Bernardino va a dejar vacante su puesto de caballero veinticuatro en 1522, conseguido por predominación de su suegro Rodrigo Mesía.
A la luz de la documentación que existe, la labor de gobierno que el conde de Villardompardo practicó en tierras americanas es una trasposición de la realidad andaluza que le tocó vivir. Para Enrique Soria dos fueron las grandes vías que posibilitaron, de manera general, el ascenso social a la cúspide nobiliaria. La primera, la posesión de un señalado nivel de fortuna, que deja adquirir poder y estatus a nivel local; la segunda, más complicada pero a la vez más veloz si resultaba exitosa, la relacionada con el servicio regio19. A diferencia de otras ciudades como Córdoba o Sevilla, a lo largo de los últimos siglos de la Baja Edad Media y hasta la primera mitad del siglo XVI, en la localidad de Jaén encontramos pocas familias correspondientes a la nobleza de sangre, entre las que tenemos la posibilidad de destacar los Torres y Portugal , los Hurtado de Mendoza, posteriormente Fernández de Córdoba a raíz de un link marital y los Ponce de León-Messía Carrillo , todos ellos correspondientes a la nobleza media.