José añadió que estuvo en la prisión hasta el 23 de septiembre de 1936 y que allí había prestado declaración ante 2 señores de paisano que le semeja eran policías. O sea, Larriva reconoció que había fusilado varias personas sorprendidas disparando contra sus fuerzas (Francisco Moreno Gómez ha identificado a una de estas personas como Francisco Martínez Fernández). Larriva añadió que no recordaba si estos detenidos fueron ingresados en la prisión de Espejo o vinieron de manera directa a Córdoba. El próximo día 2 de junio el juez requirió al directivo de la Prisión provincial para que informara del paradero de los imputados. El día 4 el director de la cárcel, Francisco Leganés Hernández, respondió al requerimiento judicial; según Leganés, Juan Martínez Osuna y sus hijos Antonio, José y Basilio Martínez Cid fueron puestos en libertad el 23 de septiembre de 1936.
Es posible que este dato fuera erróneo, que esas 11 personas fuesen conducidas a otro centro de detención distinto a la cárcel o que ingresasen en la Prisión Provincial con otra orden que se pueda haber perdido. Frente a la imposibilidad de levantar el lugar del cuartel de la Guarda Civil el capitán Larriva ordenó la retirada y volvió a Córdoba con 26 presos, según consta en el referido Historial. La misma cantidad de prisioneros cita Moreno Gómez siguiendo a Francisco Merino Cañasveras, quien añade que los prisioneros fueron fusilados en Córdoba. El 20 de julio de 1936 el capitán de Artillería Eugenio Larriva Orti dirigió, por orden del Comandante Militar de Córdoba, una expedición a Castro del Río con el objetivo de socorrer a los guardas civiles sitiados en el cuartel. Iba al frente de la 1ª y 4ª baterías del Regimiento de Artillería Pesada nº 1 y de un pelotón de falangistas, dotados únicamente de armamento rápido y con no mucha munición.
Anuario Arqueológico De Andalucía Jaén
La prensa fue unánime al felicitar al delegado provincial de Turismo, Antonio Sarazá Murcia, solicitado de la organización del acontecimiento por la Comisión de Festejos. Se llamaba así mismo al empleado que tenía a su cargo el manejo de las agujas en los cambios de vía de los trenes, para que cada tren ocupara la vía correspondiente. Los guardagujas recibían las órdenes del jefe de estación para la maniobra de las agujas y señales. No obstante, para la conservación del mecanismo, dependían del ingeniero de vía y sus usados. Debía hacer llegar a su superior cualquier anomalía en el cambio y se encargaba de cuidar, limpiar y aceitar el aparato. Disponía de un banderín y farol para hacer las convenientes señales a los usados del tren y, sobre todo, debían indicar siempre y en todo momento precaución en el sentido de las puntas de las agujas.
Según esta fuente, al llegar a Santa Cruz hallaron un grupo de unos 20 hombres en actitud sospechosa armados únicamente con una escopeta. Al entrar en Espéculo mantuvieron un rápido tiroteo, liberaron a los derechistas detenidos y detuvieron a varios elementos significados de izquierdas que han quedado en el cuartel de la Guardia Civil. Rafael Muñoz Nadales, “El Peteneras” figuraba difícil, según la prensa, en múltiples hechos delictivos, principalmente la preparación de bombas en el mes de diciembre de 1933, como la que explotó en “El Mercantil”, y en el homicidio de José Mª Herrero Blanco exactamente la misma tarde del 18 de julio. Se le creía fusilado el 21 de julio de 1936 basado en una inscripción en el Registro Civil practicada en 1943.
Según exactamente la misma fuente el 29 de septiembre de 1936 fueron fusilados Rafael Villatoro Rojano, Diego Aranda Hermoso, Diego Salido Jiménez y Francisco Rojano Salido. Los cinco fusilamientos están anotados el 21 de octubre de 1938 en cinco folios sucesivos. No se encuentran en la Prisión los expedientes de Villatoro Rojano, Muñoz Aceituno, Expósito Morales, Aranda Bello, Pinillo Sánchez, Martínez Osuna, Antonio Martínez Cid, Mármol Carretero, Miranda Moreno, Salido Jiménez y Rojano Salido. Pero hay que tener en cuenta que en el archivo de la Prisión provincial no están localizados los expedientes que corresponden a las salidas de septiembre de 1936.
Artículo De Los Bombardeos De Baena Y Cabra En El Otoño De 1938
Acababa diciendo que quizás el jurado clasificador debió aceptar obras que nunca debieron ser aceptadas con tal de poder llenar claros. Al día después publicaba unas notas sobre sus opciones, muy en la línea academicista criticada por Bernier. Bernier rompió una lanza por el único pintor en el que encontró singularidad y personalidad de estilo, un cordobés “gloria aún no toqueteada de Córdoba”, único pintor que halló actual en aquella exposición de estilos veteranos. Se refería a Rafael Botí, aún en el momento en que el jornal lo nombró, por error, como Fernando Botí.
Había unos señores llamados consignatarios que eran los que se encargaban de esta tarea y ellos se ocupaban de todo lo concerniente para facturar o recibir dicha mercancía pasándole al entusiasmado una nota del importe de este servicio. La mercancía que mucho más se movía era el aceite de oliva, “nuestro oro liquido” a toda España y extranjero en particular de la fabrica Pallares Hermanos S.A. Y sus envíos la mayor parte para el extranjero y que como eran muy importantes, tenían su propio consignatario, en donde sobresalía un buen hombre y amigo llamado Ramón Cantero París. También había un tren llamado el “Tren Mixto” que viene de Algeciras que pasaba a las 1 ó 2 de la madrugada, a este tren no subía la compañía “Corpas”.
Instituciones
La feria terminó con la anunciada “función de fuegos artificiales estilo valenciano con un final increíble”, construidos por los pirotécnicos cordobeses Manuel García Díez y Rafael Laguna. Según Períodico de Córdoba este final fue un toro de fuego que recorrió el Recorrido de la Victoria, pero Guión detalla un castillete coronado con una bandera tricolor, una estrella roja y la hoz y el martillo. El Defensor de Córdoba también hace una suave alusión a la exhibición de simbología comunista en los fuegos.
En un artículo firmado por Antonio de Baena señalaba que las obras no se habían numerado y no se habían editado catálogos hasta el día 29, cuatro días tras abierta al público. Criticaba la presentación de los cuadros, colgados en una pared pintada de marrón completamente inadecuada a ese fin y pobremente iluminados. El 30 de marzo se reunió la comisión, presidida por el concejal Francisco Amador Romero , a la que asistieron representantes de la fuerzas vivas; hubo sugerencias respecto a convocar ciertos concursos, soliciar subvenciones, celebración de conciertos y competiciones deportivas, etc. Se trató con un representante de la compañía Escriche con relación a los espectáculos taurinos y se acordó celebrar apropiadamente el séptimo centenario de la Reconquista de la ciudad.
A L E G A C I O N E S Como Señala La Memoria Del Plan Particular Que Se Somete A Información Pública:
Como datos auxiliares hay que poner énfasis que, según La Voz de Córdoba, a la detenida se le ocupó un carnet comunista y un alfiler con la hoz y el martillo, y fue sometida al Tribunal Militar pertinente que la juzgó y sentenció. Nótese como las informaciones de prensa se muestran tras la desaparición; aun El Defensor de Córdoba añade que la emisora local radió una nota oficiosa en relación con el tema. Lógicamente se trata de informaciones facilitadas por las autoridades militares, lo que lleva a preguntarse por qué ofrecer tanta propaganda a algo que podría traer consecuencias negativas. La cinta puede verse en la página El ferrocarril en Andalucía, tras ser editada por sus autores, los hermanos Antonio y Joaquín Montilla que viendo en 1984 el estado de abandono de la línea y previendo que su final no estaba lejos, reflexionaron en filmar el único tren que circulaba de modo casi regular, el ómnibus Espeluy-Puente Genil.
O sea, Brut disfrutó de tan absoluta independencia de movimientos que aun el 29 de Agosto viajó sin mayor inconveniente a Tánger donde grabó a los refugiados franceses que salieron de España con destino a esta ciudad en todo el mundo en el contra-torpedero “ Tornade”. Lógicamente, si su historia hubiese corrido peligro se hubiera puesto a buen recaudo; no obstante, el 30 de Agosto regresó a Sevilla. Llegó a Tánger vía aérea e instantaneamente se desplazó a Tetuán donde lo esperaba su inseparable amigo Jean D´Esme. Allí obtuvieron un permiso de la Alta Comisaría y sin más demora viajaron a Sevilla en una avioneta. En Sevilla estuvieron varios días sin obtener el permiso deseado para viajar hacia el frente.
Respecto a los que habían sido puestos en independencia el juez ordenó al comandante de puesto de la Guardia Civil de Castro del Río que los detuviese y los pusiese a su disposición. El sargento José Hernández Conesa contestó el día 10 de julio de 1937 que sólo había podido practicar las detenciones de Cristóbal Medina Rojano y de los hermanos José y Basilio Martínez Cid. Sobre su hijo Antonio avisaron que se encontraba alistado como falangista, mientras que su yerno Pedro Miranda Moreno estaba movilizado en un batallón de Cazadores en Marruecos. El Historial del Regimiento de Artillería Pesada nº 1 relata los hechos en las páginas 21 y 22.